TRÁFICO

Las preocupaciones no son buenas compañeras de viaje

  • Una empresa se ha propuesto medir el comportamiento de los conductores
  • Unos sensores miden las reacciones, se almacena en un ordenador y luego se analiza

Un monitor desarrolla un ejercicio del curso de 'Conducción Segura'. - ICAL
Pilar Ruiz

Existen muchos estudios sobre cómo afectan las emociones a la conducción, pero ahora una empresa se ha propuesto medir el comportamiento de los conductores.

Una discusión de pareja, problemas en el trabajo, el pago de las factura...las preocupaciones no son buenas compañeras de viaje. Castilla y León Televisión sale a la calle para comprobarlo.

Una en la cabeza y otra debajo del pecho, son dos cintas se encargan de registrar, a través de unos sensores, los ritmos y reacciones del conductor. Todo queda almacenado en un ordenador para después analizarlo. El proyecto ya ha recibido el premio de seguridad vial, pero lo mejor es que permitirá seguir investigando en cómo prevenir los accidentes de tráfico.

Mientras tanto, un consejo: dejar que los problemas se queden en tierra.