El Consejo de Ministros ha dado un paso más este 4 de junio para la puesta en marcha de ese primer Plan de Desarrollo Rural. Un programa que por primera vez contempla actuaciones en todo el territorio nacional para luchar contra la despoblación. Castilla y León será una de las regiones prioritarias.

Castilla y León será una de las comunidades autónomas más beneficiadas. Junto con Andalucía y Castilla La Mancha, las tres absorverán la mitad del presupuesto. Un fondo que contempla hasta 2014 más de 2.500 millones de euros y que se financiará al 50% entre el Estado y las Comunidades Autónomas.

En nuestra comunidad, éste será el reparto. Todas las provincias cuentan con zonas sensibles que serán el objetivo de este primer programa de desarrollo rural. La comarca de Tierra de Campos, las merindades burgalesas o la Sierra de Salamanca son sólo algunas de ellas.

El objetivo de este plan no es otro que impulsar el desarrollo de aquellas zonas que sufren un mayor atraso. La idea es hacer un diagnóstico de cada una de ellas y así, poder atajar sus problemas de forma concreta.

Las medidas que se contemplan son muy diversas: desde la concesión de préstamos para modernizar infraestructuras turísticas y ayudas a empresas hasta la prestación de servicios y asesoramiento a entidades como las denominaciones de origen. Pero también se incluyen subvenciones a las iniciativas de agricultura ecológica, programas de fomento del empleo o inversiones en comunicaciones.