Nicanor Sen sabe lo que es enfrentarse a una crisis minera. Hace unos años las minas de Sabero colgaban el cartel de cerrado. Se perdían 1000 puestos de trabajo. 1000 salarios de los que vivían 2.500 personas. La situación era muy ‘compleja’, recuerda Sen, ‘el último recurso de la localidad desaparecía’. La despoblación se agudizó tras el cierre de las minas.

Ahora, el sector minero de Castilla y León vuelve a pasar por una situación crítica, sobre la que Nicanor Sen se muestra ‘poco optimista’, debido al ‘boom’ de las energías renovables por el que apuestan algunos partidos políticos.

‘En la actualidad 7.500 personas trabajan en el carbón y 30.000 familias viven indirectamente de este mineral. La solución a los problemas tiene que salir del seno de la Comunidad Económica Europea.’, ha destacado.