TRAS LOS GRAVES INCIDENTES

Correa toma el control de Ecuador

  • El Presidente de Ecuador es liberado tras horas de encierro
  • UNASUR condena el intento de golpe de Estado

Pilar Ruiz

Ecuador trata de recuperar la normalidad tras los graves incidentes protagonizados por miembros de la policía. Todo comenzó con las protestas de la policía. Pedían que se derogara la ley que suspende el sistema de ascensos y beneficios salariales. Los gases lacrimógenos alcanzaron al presidente Correa, que había acudido a aplacar a los manifestantes.

A partir de ahí, la confusión prende como la pólvora en las calles. Los disturbios se multiplican, el aeropuerto queda cerrado mientras que cientos de personas salen de sus casas para apoyar a su presidente.

Los policías sublevados rodean el hospital donde Rafael Correa ha sido trasladado. Tras duros enfrentamientos entre la Policía y el Ejército, y diez horas de encierro, el mandatario logra ser liberado. A esas horas, el Gobierno confirma ya la muerte de 3 personas y decenas de heridos. El propio coche del presidente es tiroteado en el traslado.

Finalmente, el Ejército logra tomar el control en Guayaquil. Ya más tranquilo, Rafael Correa concede una rueda de prensa donde ha prometido impunidad para quienes hayan participado en la protesta.

En los mismos términos se ha posicionado la opinión internacional. Un ejemplo es la condena enérgica que los países de UNASUR han lanzado contra estos hechos.