Marcos padece obesidad desde que tiene 7 años. Ciertas miradas y comentarios hicieron que se encerrase en sí mismo y su salud mental se vio perjudicada. Gracias a su fuerza de voluntad y a la ayuda psicológica pudo salir adelante: "Tomé la decisión de empezar a ir a un psicólogo, bueno, iba a dos: un psicólogo que me ayudaba con el tema nutricional y otro a nivel emocional, y gracias a esa ayuda puede salir adelante", declara.

Fue una decisión que cambió su vida. Comenzó su cambio físico: "Mentalmente estoy espectacularmente bien. El venir al gimnasio y verte más ágil, que te cuesta menos respirar, esas cosas que parecen bobadas, pero que, para una persona con mi peso, son logros espectaculares", afirma Marcos.

Aunque llegar a sentirse así no ha sido algo fácil. Al principio, ir al gimnasio podía dar cierto temor: "Miedo a si la maquinaria va a estar adaptada a mi tamaño, me voy a ver en el vestuario con poca ropa", explica Angélica Rodrigo, monitora de sala fitness en el CDO Covaresa.

Los prejuicios, muchas veces, son los grandes protagonistas. Según la Sociedad Española de Obesidad, 3 de cada 4 adultos con esta enfermedad se sienten discriminados: "Hay mucho componente biológico, psicológico y social. No hay que estigmatizar, no hay que culpabilizar. Hay que entender y darles las herramientas adecuadas a todas estas personas", declara Cristóbal Morales, vocal de la Sociedad Española de Obesidad.

Comprenderles para así facilitar procesos como el que está experimentando Marcos. Además de cambiar su estilo de vida, intenta ayudar a los demás a través de sus redes sociales: mar0fit.

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